ENTREVISTA | Jose Pedro Marín Murcia, fundador de la Asociación de Amigos del Jardín Botánico y el proyecto de 2012
Jose Pedro Marín Murcia: “La gente quiere disfrutar de un jardín rico y diverso, un pulmón verde, pero con historia”
Jose Pedro Marín Murcia es biólogo especializado en la rama de la botánica y doctorado en didáctica de las ciencias experimentales. A lo largo de su trayectoria ha investigado sobre colecciones de historia natural y patrimonio científico. Por su dedicación a la botánica y su pasión por el patrimonio científico, una de sus inquietudes ha sido el jardín del Malecón. Este lugar tuvo unas décadas de esplendor en el pasado. Sin embargo en la actualidad no se puede considerar como un auténtico jardín botánico. Marín fundó en 2012 un proyecto asociado al ayuntamiento para recuperar, reivindicar y proteger dicho lugar.
Jose Pedro Marín Murcia en uno de los parterres de Amigos del Jardín Botánico
¿En qué consiste el proyecto actual del Jardín del Malecón?
La Asociación de Amigos del Jardín Botánico de Murcia se inició en 2012, junto al Ayuntamiento de Murcia a partir de un convenio, un proyecto para reivindicar y proteger el legado de este espacio. Se solicitaron al Ayuntamiento dos parterres para realizar la plantación de especies autóctonas de la región de Murcia y otra de interés etnobotánico así como paneles identificativos de las especies. De esta forma se ha ido completando el número de especies que albergaba el Jardín y se ha tratado de dar a conocer a los visitantes la flora regional y mediterránea que, hasta la fecha, era minoritaria en el mismo.
¿De qué situación parte este proyecto?
El Jardín ha visto reducida su superficie verde y cada vez ha ido a más su uso como recinto ferial, siendo ocupado durante mucho tiempo entre fiestas, montaje y desmontaje. Se ha llegado a un punto crítico y ante la posibilidad de perder espacios divulgativos y verdes surge esta iniciativa.
¿Cuál fue el origen del proyecto?
En su momento este espacio educativo fue considerado como uno de los mejores jardines de Instituto del país y todavía conserva algunos de los ejemplares que sirvieron para la enseñanza de la botánica. Para nosotros era crucial poner en valor el lugar y recuperar algunos parterres para su uso divulgativo. Se inicia por medio de algunos compañeros de la Universidad de Murcia de la Facultad de Biología y de Educación, antiguos alumnos de Botánica y vecinos del Malecón, San Antolín y la Arboleja.
¿Qué se ha hecho por recuperar la memoria histórica de este jardín?
A los nuevos trabajos realizados para aumentar la representación floral de la Región tenemos que sumar la de la recuperación de la memoria educativa del Jardín Botánico del Instituto Provincial de Murcia que tuvo en este espacio el lugar donde hacían las prácticas los alumnos de Historia Natural y Agricultura entre el siglo XIX y primera mitad de siglo XX siendo uno de los mejores de instituto según rezan las crónicas. Para ilustrar esto, proponemos la instalación de algún panel conmemorativo con imágenes originales y el desarrollo de material educativo entorno al legado del Botánico.
¿Cuáles son las especies más representativas que se han plantado?
En el parterre se ha tratado de incorporar el mayor número de especies representativas de los diferentes ambientes o comunidades vegetales de la Región de Murcia, así como flora silvestre protegida por las normativas vigentes o Listas Rojas. Es muy difícil seleccionar unas pocas pero un caso particular es el del garbancillo de Tallante (Astragalus nitidiflorus) que, de los ejemplares donados en 2016 y 2017 por el Proyecto LIFE Conservastratragalus-MU, se obtuvieron 67 frutos (2016), que fueron entregados al Banco de Germoplasma de Flora Silvestre de la Región de Murcia. De esta forma se contribuyó a la conservación de la especie, una de las razones de ser de un Jardín Botánico. Además, se plantaron ejemplares de otras especies en peligro de extinción como la esparraguera del Mar Menor (Asparagus macrorrhizus) y la jara de Cartagena (Cistus heterophyllus subsp. carthaginensis) aportadas por la Oficina de Impulso Socioeconómico del Medio Ambiente de la Región de Murcia.
¿Qué se ha perdido desde los siglos pasados?
A finales de siglo XIX y principios del XX el Jardín tenía invernaderos para plantas tropicales y recibió plantas y semillas del Jardín Botánico de Madrid y del de Valencia. De aquello sólo quedan unos pocos ejemplares originales, así como la puerta del recinto. Tras la guerra civil, el jardín sufrió mucho hasta la creación del Jardín del Malecón en 1974 que unificó el Botánico con los antiguos huertos.
¿Cree que algún día el Jardín volverá a ser lo que fue durante el siglo XX?
Este jardín era el Jardín Botánico del Instituto de Murcia, reservado a los estudios de las cátedras de Historia Natural y Agricultura. A finales de los 70 se planteó como Jardín Botánico público y funcionó hasta mediados de los 90 cuando el Jardín empezó a ser usado para las fiestas de Murcia.
¿Cuál es la perspectiva de futuro?
El futuro de este espacio a raíz del nuevo proyecto debe ser su restauración y uso como parque público y lugar para la divulgación científica.
¿Se ha progresado en los últimos años?
Esperamos que los anuncios relativos al cambio de ubicación de los festejos se ejecuten y se libere el jardín de esta losa.
¿Qué es lo que impide que el Malecón sea un verdadero Jardín Botánico?
Principalmente la voluntad política de trasladar las fiestas de Moros y Cristianos, Huertos y Barracas. Pese a todo no será un jardín botánico como institución científica pero si podría serlo para la divulgación científica y la conservación de especies.
¿Cree que los ciudadanos conocen este proyecto? ¿y el jardín en sí?
La historia del Jardín Botánico es desconocida para el gran público. Los jardines botánicos se consideran “museos vivos” por las plantas que atesoran, clasificadas y ordenadas conforme a criterios científicos, estéticos y educativos. Son además un atractivo para la ciudad y cumplen una función fundamental en la conservación de especies de interés.
¿Cree que se implicarían más si hubiera más información?
No se trata tanto de información como de una cuestión de formación y de rescatar la memoria educativa. Para ello hace falta que la administración y los representantes públicos vean esta necesidad. Así como la implicación de la comunidad científica y entidades profesionales de la Biología.
¿Cree que los murcianos quieren tener un jardín botánico en la ciudad?
Mucha gente se acerca al parterre o escribe en las redes sociales diciéndolo o expresando su apoyo. Pero ante todo habría que explicar qué es un jardín botánico.
Si se eliminaran las fiestas, ¿sería bien valorado el cambio?
Sería muy bien recibido por los vecinos ya que sufren mucho las molestias de los ruidos e insalubridad que provocan las fiestas, además que echan de menos los espacios con más árboles y diversidad, así como las placas identificativas. La gente quiere disfrutar de un jardín rico y diverso, un pulmón verde, pero con historia. Algo que de prestigio al oeste de Murcia y al entorno del Malecón.